El Tendedero: La tormenta Blas se ha cebado con el Mediterráneo y sobre todo con las Baleares. El ojo más importante trabaja con fuerza y podría terminar convirtiéndose en un ciclón. El Govern, Consell, Delegación de Gobierno y los Ayuntamientos piden que nos nos fiemos porque hasta el sábado al menos pueden prolongarse las precipitaciones, fuertes vientos, y poner en peligro la vida de personas si no se cumplen los protocolos.

De momento el grueso de lluvias ha ido a parar al norte de la isla de Mallorca, pero no se descartan precipitaciones en el sureste. Es una DANA con nombre propio que está estacionada en nuestra zona y no sed moverá hasta que el anticiclón de la península deje libre su movimiento. Las lluvias han ido de cantidad menores 31 litros por metro cuadrado hasta las mayores 190 litros. Los embalses de Mallorca están notando la DANA.

La sangría económica del pago de la zonas verdes no la aguanta nadie, por muy saneado que sea el Ayuntamiento. No entiendo los criterios del Tribunal del Justiprecio y los Jueces, obligar al pago de zonas verdes a precio de suelo urbano de primera no es comprensible. Menos mal que los vecinos de Manacor han ahorrado 40 millones de euros en los últimos 15 años, de lo contrario nuestra situación económica sería de quiebra técnica. La última expropiación anunciada por el equipo de gobierno han sido 5,4 millones de euros, en una zona del Camí de la Mar y la Ronda del Matí de S'Illot, donde se tuvo que urbanizar parte de los accesos reglamentarios.

Hubo recientemente otra de más de 8 millones de euros, dos de 2 millones de euros, otras de varios miles, una séptima de 400.000 euros. Hasta cuando debemos soportar un expolio de tamañas dimensiones. El suelo vale lo que están dispuestos a pagar quienes lo compran y en estos casos la oferta y la demanda estipula la quinta parte, un robo a la colectividad con todas las palabras.

La vida pende de un fino hilo, de repente todo termina en el aspecto terrenal y solo queda dolor y lágrimas de quienes te recordarán para siempre. En los últimos meses se nos han ido conciudadanos y vecinas muy jóvenes entre edades de 40 años a 60 años, un tiempo escaso para dejarnos. Las esquelas del Parc del Auba no dejan dudas, si repasas un poco te encuentras defunciones de 37, 39, 45, 57, 63, 65, y más recientemente dos amigos de 71 años. Es una lista donde cada día va corriendo la vez. No hay tiempo para enfadarse, lágrimas, enfurecerse, tristezas, melancolías, enfados, malas caras.

Es momento de optimismo, agarrarse a la vida, disfrutar, abrazar a quienes queremos, viajar, sobremesas, encuentros familiares y de amistad. Disfrutar la naturaleza, dejarse acariciar por el sol, descubrir postales. Lo mejor que podemos hacer para honrar a quienes se van es que nos vean felices. Conozco muchas personas que los médicos les han informado enfermedades antipáticas y dolorosas. Vivir ordenadamente, pero aprovechando los momentos.

Sale de la cárcel en Palma después de cumplir una pena merecida y se lanza a buscar trabajo porque le dice a la jueza que está rehabilitada. Se desplaza a varios lugares pidiendo una oportunidad. Una persona mayor que necesita ayuda le tiende la mano. El mismo día de firmar el contrato laboral y comenzar los trabajos de atención al mayor le roba 1.400 euros en efectivo y las joyas. Ustedes mismos deben valorar lo que les estoy contando, ha pasado esta semana en Palma, todo real, en directo. Decía un famoso preso que la rehabilitación es una palabreja que solo pretende dar trabajo a una serie de burócratas.

El mundo te da sorpresas. Ayer corría por las redes sociales fotografías de una cárcel de España, los internos disfrutan de piscina, campo de juego, pistas de pádel, sala de reuniones y televisión, biblioteca, cuatro comidas, ambulatorio, zonas de ocio y otros servicios. No cuestiono si está bien o mal, solamente que si suponen un elevado gasto que procede de nuestros impuestos que hagan trabajos como todos para seguir viviendo.