A la espera de la autopsia concluyente y que aclare todos los extremos, la investigación en su primer informe de conclusiones sospecha que Pau Martínez Bosch de 17 años murió previsiblemente por un sobresfuerzo, aparejado a una intoxicación por dióxido de carbono. Se sumergía a pulmón libre muy seguido sin hacer los descansos supuestamente necesarios y aconsejables en el protocolo de recuperación. Por eso poco a poco iba envenenando su sangre y le faltó el oxígeno. Eso produce hipercapnia que desencadenó su desvanecimiento y posterior muerte.

Cuando se está tan emocionado sumergido una y otra vez, hay momentos que se olvidan los buceadores, que si estas sumergido mucho tiempo hay peligros, no somos peces y tenemos que respirar hasta tener oxígeno necesario en sangre. El exceso de anhídrido carbónico puede derivar en dolor de cabeza, debilidad, fatiga, somnolencia o desmayo e inconsciencia y si se lleva al extremo puede finalizar en muerte. Deben tenerlo muy en cuenta todos los buceadores, hasta los más expertos.

La consternación es total en Manacor, hasta el lunes 2 de septiembre las banderas estarán a media asta en todo el municipio. Ayer mismo el padre de Pau Martínez Bosch dio las gracias en una carta en las redes sociales y de inmediato cientos de personas le contestaron dando el sentido pésame a la familia. El mundo del deporte llora su pérdida, el Bàsquet Manacor suspendió todos los encuentros y actividades. El colegio La Caridad y el Instituto donde ha estudiado y estudia están de duelo y han emitidos sendos mensajes de recuerdo. El Ayuntamiento de Manacor tiene un crespón negro en su página web oficial.

Ayer día 30 desde las 16:30 horas y hasta las 20:30 horas se acompañó a los padres y familia en el tanatorio Parc del Auba de Manacor, el encuentro fue multitudinario como nunca. Hoy sábado día 31 sigue el duelo en el tanatorio de las 9 de la mañana a las 13:00 horas, allí mismo en el Camposanto se despedirá al joven de 17 años. Desde estas páginas, el Diario Digital Manacor Noticias y su redacción le damos un sentido pésame a su padre Pedro Martínez, a su madre Milagros Bosch, a sus hermanos Aina y Pere Antoni, a sus padrinos, resto de familiares y amigos, a todos ellos fuerza y adelante. Seguramente hoy, esta mañana el tanatorio se quedará pequeño. Lo querían muchísimo, se ha demostrado. Se nos ha roto el corazón.